lunes, 27 de febrero de 2017

El regiomontano



Que tiempos aquellos cuando existía el tren de pasajeros. Viajar del D.F. hacía el norte del país y viceversa, era algo pesado, por las horas que se hacían, pero era una experiencia muy gratificante. Hoy a mis 36 años, recuerdo con nostalgia esos viajes en el Regiomontano, que tenía como ruta de la Ciudad de México hasta Nuevo Laredo, Tamaulipas. El mote era solo porque pasaba por Monterrey, pero no era la única ciudad, pero en fin, así era como se llamaba. 

Hacia varias escalas por las ciudades principales por las cuales iba pasando en su recorrido. ¡Ay que recuerdos! pareciera que veo al empleado del tren con su campanita en mano anunciando el destino. 

Mis viajes en tren, se debieron a mi abuelito, a quien le gustaba mucho este medio. Mis recuerdos son un poco vagos, ya que mi último viaje en tren fue en el verano de 1992, así que ya han pasado muchos años. 



Como niña era divertido viajar en camarote, ir sentado viendo el paisaje por la ventana y luego alrededor de las 7:00 p.m, ir al vagón restaurante a cenar. Para luego regresar y convertir el asiento en cama. Yo siempre quise dormir en la cama de arriba, pero por seguridad, o más bien por la sobreprotección de mi abuelito nunca me dejo. Dormir en el tren era una tarea imposible, era un poco ruidoso su paso por las vías y el trajín de los vagones. Pero lo mejor, era que alrededor de las 6:30 a.m ya estábamos casi llegando a nuestro destino. Nos vestíamos súper rápido para esperar que se anunciara el destino y que el tren detuviera su marcha. 



Que triste que el gobierno lo haya privatizado y nos haya quitado este medio de transporte, porque claro que hay muchos más, pero este tiene ese dejo de nostalgia que lo hace una experiencia muy agradable. Claro que ahora que la gente vive corriendo, todos quieren ahorrar tiempo y si es mucho más cómodo el avión o el automóvil en distancias cortas. Pero yo si extraño el tren. Tal vez sea porque es de los muchos recuerdos que están ligados a mi abuelito. Una de las personas más importantes en mi vida. 

viernes, 24 de febrero de 2017

A cantar...

Es viernes y eso me hace feliz y hoy solo quiero cantar a todo pulmón mis temas favoritos de mi infancia, jajajajaja sí, de esos que aunque han pasado los años me levantan el ánimo y me ponen a bailar, sí a bailar a mi la que no lo hace más que en casa y a solas y oyendo a Menudo.

No te reprimas 

Canta, baila sin parar
Sube, baja con libertad
Sueña, ríe como yo
Salta, grita oh, oh

La terapia, psíquica, más lógica
para el sistema neuronal
aconseja, entre otras cosas
dar un grito fuerte
cuando quiero gritar
 es muy bueno, saludable, relajante
y a veces artístico
por eso baila, salta, grita, oh, oh

Ya mi abuela me decía
no reprimas el impulso de gritar
no controles, no domines, no moderes, no sujetes
Sienta muy mal
 deja que tu mente se relaje
pero no utilices represión

Por eso baila, salta, grita, oh, oh

No te reprimas, no te reprimas, no te reprimas
No te reprimas, no te reprimas, puedes soñar
No te reprimas, no te reprimas, no te reprimas
Canta, baila, sube, baja, sueña, ríe, salta como yo

Canta, baila sin parar
Sube, baja con libertad
Sueña, ríe como yo
Salta, grita oh, oh

Si eres alto, eres bajo, eres gordo, eres flaco
Que más da
el amor no tiene metro ni tampoco
kilogramo para pesar
Sólo tiene un sentimiento que no debes nunca,
nunca reprimir
Por eso baila, salta, grita, oh, oh

No te reprimas, no te reprimas, no te reprimas
No te reprimas, no te reprimas, puedes sonãr
No te reprimas, no te reprimas, no te reprimas
No te reprimas, no te reprimas, puedes sonãr


jueves, 23 de febrero de 2017

MENUDO

La alineación que desató el Boom de Menudo. René, Johny, Xavier, Miguel y Ricky.

No sé exactamente cuando ni como comenzó mi gusto por el grupo Menudo. Era muy pequeña cuando ya me emocionaba con ellos. Nunca he sido muy normal. Tengo algunos recuerdos un poco borrosos de mi afición hacia ellos cuando era una niña de sólo 2 años. Sigo sin entender como siendo tan pequeña me gustaban tanto, pero en ese momento la menuditis estaba en su apogeo. Salían en todos los programas de televisión, se escuchaban en todas partes, salías a la calle y sus caras estaban en todos los puestos de revistas. Creo que fue eso, más a parte mis tías que eran una niñas de 10 y 12 años los escuchaban, así que, si a una niña de tan corta edad, la expones a tanto menudo, o termina odiándolos o amándolos. A parte, eran 5 niños bonitos (buenos algunos no) y carismáticos, que vestían con trajes llamativos (ay esas mallas y pantalones pegados que los hacia ver más flacos de lo que eran, jajajaja) y sus canciones eran pegajosas y fáciles de aprender. Cabe resaltar que Menudo empezó como grupo infantil, con canciones muy tiernas y añiñadas. Poco a poco fueron introduciendo temas referentes al primer amor y con toques más juveniles. 

Cuentan mis papás, que cuando me llevaban al supermercado, si pasábamos cerca del área de discos y veía alguno de Menudo, lo tomaba sin preguntar y no lo soltaba hasta llegar a la caja. Pero estoy segura que ellos al ver que me gustaban y me emocionaba mucho al verlos en la tele, han de haber forzado esos encuentros entre los discos y yo. Y es que la menuditis estaba tan fuerte que muchos programas aprovechaban para imitarlos. Mis tíos disfrutan contando que cuando salían esas parodias en la tele me decían: Aby, esta Menudo en la tele. Entonces yo corría emocionada para ver que me habían engañado. Yo enojada les decía: ¡ESOS NO SON MENUDO! y lloraba (era muy pequeña) y todos soltaban una carcajada. Como era una niña de entre 2 y 3 años, esto les causaba mucha gracia, y cada que se acuerdan se vuelven a reír. 

Mis papás que me consentían bastante, por ser la primogénita y que les debía enternecer mi fanatismo ante Menudo, alimentaban este gusto, porque eran ellos los que me ponían los discos para escucharlos. Cuando se lanzó en un programa de radio un concurso para ganarse 2 boletos para el concierto del Estadio Azteca en 1983. Mi papá enseguida habló a la radio y se ganó los boletos. Estaba muy contento, hasta que mi mamá le dijo: es demasiado pequeña para que la llevemos a un evento de ese tipo. Así que dos hermanos de mi mamá fueron los afortunados en acudir a la noche que el Azteca cantó. Mi tía Lupita que tenía como 12 años y que era una fanática moderada (le gustaban pero no era coleccionista de afiches ni discos del grupo). Ella cuenta que les tocó bien arriba y que veía como hormigas a los integrantes (el estadio estuvo a su máxima capacidad, 100 mil personas). Que envidia, lo que hubiera dado por haber tenido la edad de mi tía y haber estado en ese concierto que rompió récords. Hoy veo videos y se me enchina la piel al escuchar a todos coreando los temas de mi grupo favorito.

Miguel, Xavier, Charlie, Johny y Ricky

Menudo era un buen pretexto para hacer de mi lo que quisieran, como por ejemplo obligarme a comer verduras. Recuerdo vagamente, que yo tendría como 3 años y que intentaban hacerme comer un arroz con chícharos. Cansados de que no probaba bocado, mi papá dijo: A Xavier le gustan muchísimo los chícharos... Entonces, ¿qué hice? me comí los chicharos solo porque a Xavier le gustaban según mis padres. 

Xavier Serbia, fue uno de los integrantes más guapos.
El gusto por Menudo, continuó con los años, aunque ya de una forma más tranquila, a la par que el grupo iba evolucionando y cambiando de integrantes y de estilos musicales. Me gustaban, pero no era de las que salía corriendo a comprar discos o revistas, me conformaba con verlos en programas de televisión o escucharlos en la radio. 

Rubén, Ricky M.,Ralphy, Sergio y Raymond

Atrás: Sergio, Robert y Rubén. Adelante: Rawy y Angelo

Atrás: Ashley, Alexis, Andy, Adrián. Adelante: Abel


Pero en 1991, cuando el grupo reapareció luego de la renuncia de 4 integrantes y todos los escándalos y problemas que hubo, mi fanatismo por ellos resurgió con una fuerza increíble. Tenía 11 años, era una puberta, que comenzaba a sentirse atraída por el sexo opuesto. Fue así que cuando escuche el tema de "Me sigue pareciendo frío" quede nuevamente contagiada de Menuditis, y cuando ví el anuncio del disco en televisión, me enamoré de sus integrantes (todos guapísimos) pero en especial Andy. En ese momento a mis 11 años, me parecía el niño más bonito que había visto. Fue mi gran amor platónico. Bueno, como mi 5° amor, porque primero fue Miguel, luego Xavier, Sergio y Robert, todos integrantes de Menudo. 


Andy mi menudo favorito


Me gustaban mucho, compraba cuanta revista saliera de ellos. Mis papás nunca criticaron o juzgaron mi locura por el grupo. Al contrario. Aun recuerdo que una tarde estábamos en una tienda y le supliqué a mi papá que me comprara el disco de "Detrás de tu mirada" (1991), que era el más nuevo. Me dijo que no y nos fuimos. Varios días después, mi papá no llegaba a la casa, él siempre fue muy puntual, a las 4:30 p.m llegaba directo a comer. Pero ese día llegó hasta las 6:00 p.m y me entregó una bolsa, adentro venía el CD de Menudo. Mi papá se había tardado porque saliendo del trabajo fue a buscar lo que la loca de su hija le había suplicado que le comprara días antes. Son estos pequeños detalles que no olvido y que hacen que mi familia este tan envuelta en todo este fanatismo. No fue la única ni última vez que mi papá me compró un disco de ellos. Aún recuerdo que en el 92, vinieron a visitarme a a la ciudad donde vivo y traían para mi el CD de "15 años". Ellos de manera indirecta (o bien directa porque los ponía todo el santo día y a todo volumen) se aprendieron las canciones y conocen a los integrantes. Jajajaja los dejé muy bien entrenados. Hoy nos es raro ir a visitarlos y sorprender a mis hermanas oyéndolos o a mi papá tarareando "Súbete a mi moto". O a mi mamá comentándole a mis hermanas: ay esa canción (de Menudo) como me recuerda a Aby. Pero lo mejor y que ha sido culpa de mis hermanas, es que han hecho que mis sobrinos se aprendan temas de Menudo. Es genial ir con ellos en el coche y que me digan: Tía pon la de "Coqui" y la de la "piscina de espaguettis" (Tú te imaginas). Que hace la tía Aby, obedecer a las órdenes de sus sobrinos. 

Tengo que confesar que al que si le he cantado por iniciativa propia temas de Menudo es al más pequeño de mis sobrinos. A él lo arrullo con la de "Tú te imaginas" y lo mejor es que el bebe se emociona, brinca y me aplaude cuando se la canto.

Atrás: Andy, Ashley y Abel. Adelante: Alexis y Ricky III


Pero regresando a mi historia, en el 92 que dejé mi ciudad y a mi familia, el grupo también dejo de visitar el país. Tuve que conformarme con saber de ellos a través del cable viendo programas de Venezuela y Perú. La loca de mi junto con una amiga de la secundaria nos pusimos a escribir cartas para que regresaran, mi amiga no era fan, solo me seguía la corriente. En esa época difícil que fue estar lejos de casa, mis amigos y mi familia, me refugie en ellos. No fue nada fácil vivir con una bisabuela y abuela paterna como las que tuve. Los que tuvieron la desgracia de conocerlas lo saben. Sumando a esas 2 personas, más mi tía y su familia, la niña que me me hacia bullyng en la escuela, que la ciudad no terminaba de gustarme, que la comida no me gustaba, extrañaba la de mi mamá, mis cambios físicos, y demás, me fui deprimiendo, me encerraba en mi cuarto y en mi mundo. Pero me aferré a mi fanatismo, ellos se convirtieron mi tabla de salvación. El escucharlos, el verlos aunque fuera en televisión hacía que me escapara de mi realidad para instalarme en mi mundo Menudo. Sus cambios constantes me mantenían a la expectativa, yo solo pensaba, el próximo año qué disco y canciones sacaran. 

En 1997, una amiga coleccionaba la revista Tú, en ella al final ponían una lista de personas que deseaban tener amigos por correspondencia. Fue así como una vez, vi que una chica venezolana de mi edad, eran fan de Menudo, le escribí y 2 meses después comenzamos a enviarnos cartas. Era genial por fin conocer a alguien que entendiera mi gusto por el grupo, aunque estuviéramos a kilómetros de distancia.  Hoy gracias a las redes sociales continuamos en comunicación y gracias a Menudo he hecho amigas a la distancia, con las que comparto este amor por todo lo que sea relacionado con ellos. 


Por el deseo de tener este disco hice amigos por correspondencia


Yo seguí siendo fan, aunque mi integrante favorito ya había dejado el grupo y este se había convertido en MDO. Continué comprando sus discos hasta el 2000 más o menos, que les perdí la pista y comenzaron a salirse todos los que formaron la alineación de Menudo 1996. 

Gracias al Reencuentro en 1998, la menuditis regresó para atacar nuestra nostalgia y en las tiendas de música uno podía encontrar de nuevo los discos de Menudo en CD. Fue genial ese regreso de 6 de los integrantes más icónicos e importantes. Los que contagiaron de menuditis a  América Latina. En aquel entonces estudiaba la carrera y no asistí a ningún concierto, no por falta de interés, si no de dinero. Ya que el dinero que me daban cada semana muy a penas me permitía cubrir mis costos de transporte y material de trabajo. El reencuentro siguió varios años de gira, pero luego de la carrera, que conocí a mi esposo, me volqué sólo en él. 


Charlie, Robert, Ray, René y Miguel


En el 2015, el Reencuentro anuncia 2 bajas y una incorporación que a todas nos llamó la atención. Dejaban el grupo Johny y Ricky y se sumaba a Robert. Además de haber logrado que se les permitiera usar el nombre de Menudo. Cuando escuché la noticia no me entusiasmo, como iban a compaginar tantos años de diferencia entre Miguel, Charlie, Ray y René con Robert. Estuve piense y piense en si debía o no ir, yo estaba atravesando un duelo dificil. Pero Menudo siempre despertaba en mi expectativa, así que me animé y me fui a verlos a Monterrey, N.L. Ellos me devolvieron la sonrisa, esa que muchos meses atrás había desaparecido. Fue genial estar en un auditorio rodeada de miles de mujeres con las que comparto un gusto. Brincar y gritar de emoción, regresé por 2 horas a mi infancia. A la mejor época de mi vida. Nuevamente mis menudos me hacían feliz. 


Mi boleto del concierto de Menudomanía 2016 


Por eso en el 2016, cuando se anunció el espectáculo de Menudomanía, no podia creer que mi sueño de toda la vida iba a hacerse realidad: Ver a diferentes integrantes de distintas épocas del grupo en un solo escenario. La fecha, fue el 12 de Octubre. Muy contenta avisé a mi familia en el D.F. que iría para ver a mi grupo en concierto. Lo mejor, que una de mis tías, quería ir también. Sí, mi tía Lupita, la misma que los había visto en el estadio Azteca. 

Mi familia sabe cuanto me gusta Menudo, ellos estaban emocionados por mi. El día que llegué, inmediatamente una de mis primas dijo: Vamos entrando en ambiente,vamos a escuchar a Menudo.


Menudomanía: Robert, Rawy, Charlie, Pablo, Miguel, Ashley, Didier, Jonathan, Alecis, Daniel y Abel 

El día del concierto, una de mis tías me maquilló y tomó fotos cuando salía rumbo al Auditorio Nacional. Una de mis primas (que no le gusta nada esta música) estuvo siguiendo los pormenores del evento en internet. Mi tía Lupita y yo, ella fan de las primeras generaciones del grupo y yo bailamos, brincamos y gritamos como dos adolescentes. Yo esa noche tuve un reencuentro con mi infancia y adolescencia. Olvidé todo y solo me concentré en divertirme, en emocionarme como cuando tenía 13 años y me encerraba en mi cuarto para cantar "Lo que juramos". Terminé afónica, pero feliz. Porque eso es lo que hace Menudo, me llena de felicidad. 

lunes, 20 de febrero de 2017

ANTIFEMINISTA



Soy mujer y me encanta serlo. Como mujer de la generación X, no soy nada feminista.  Sí, aunque muchos al leerlo se quieran morir y atacarme. 

Fui criada en un matrimonio tradicional de los años 80´s en donde el padre se iba a diario a trabajar y la madre se quedaba en casa haciendo labores en el hogar y cuidando a los hijos. Ese modelo, lo traían ya bien aprendido mis padres de sus progenitores. 

En los últimos años ha habido un empoderamiento de la mujer y marchas en pro de la igualdad. Lo siento pero hombres y mujeres nunca seremos iguales. Nos guste o no, los hombres son el sexo fuerte y nosotras físicamente somos en su mayoría más pequeñas y débiles. Eso de que las feministas quieran a fuerza competir con los hombres no me parece nada bien. 

En la cuestión civil, estoy de acuerdo en que los derechos de ambos sexos sean los mismos. Pero de ahí a que las mujeres feministas luchen porque cumplamos con los mismos roles no coincido. Claro que en la época actual es necesario, por economía que la mujer salga a trabajar y combine esto con sus tareas de ama de casa. Pero soy de la vieja escuela que le gusta que sea la mujer la única que se haga cargo de la limpieza y orden del hogar. Las mujeres somos más delicadas y detallistas, hacemos las cosas con un toque diferente. Los hombres son toscos y bruscos. Creo que en parte algunos matrimonios actuales no funcionan porque hay mujeres aferradas a querer competir laboralmente con el marido, en llevar más dinero a casa. Eso no está bien, debe haber un equilibrio de desempeño de labores para poder llevar a flote un matrimonio. 

Hace unos años, una tía me contó que cuando enfermó de cáncer de mama, su psicóloga le dijo que hay una tribu, que es matriarcal, en donde las mujeres se mutilaban un seno, ya que este les estorba para cazar. No sé que tan confiable sea esta historia, pero el caso es que la psicóloga le decía a mi tía, que las mujeres actuales están tan empeñadas en competir y superar al hombre que biológicamente estamos mutando y por eso tanto cáncer de mama. Porque a las mujeres esa parte del cuerpo se le dio para amamantar y criar, y que al querer igualarnos con un hombre estamos despareciendo nuestros rasgos femeninos. Suena un poco loca esta teoría, pero si lo vemos bien, no esta tan lejos de la realidad. El cáncer da por mil razones, pero pongo este ejemplo porque me llama la atención.

Aprendí que como mujer debía cuidar cuando llegara el día, sí es que llegaba, de que al casarme, yo debía ser una buena ama de casa. Cuando eso sucedió, ame cuidar de mi casa, de limpiarla, eso sí, fallé en algo, la cocina, esa nunca me gustó para nada. Sí, falle un poco en el modelo, pero me esforcé en poner todo de mi parte. Fue más gusto que obligación. Me gustaba lavar y planchar la ropa de mi marido. Mantener mi casa bien limpia para cuando el llegara del trabajo. Para nada sentía que las tareas del hogar fueran pesadas y que él tuviera que ayudarme en ellas. No me gustaba para nada que él barriera, trapeara o hiciera algún quehacer a excepción de la comida. Ya que el amaba cocinar y lo hacia muy bien. 



Como mujer me gustó mucho sentirme protegida por un hombre, que se encargaba de las tareas pesadas. De arreglar todo desperfecto con sus herramientas de trabajo. Hoy que me encuentro sola, a veces he tenido que agarrar martillo en mano. Pero prefiero mil veces que sea un hombre quien se ensucie las manos con las herramientas para arreglar desperfectos. Después de todo, no importa tanto si soy mujer, soy débil y no me gusta nada de lo que tenga que ver con herramientas, ya lo dije antes, fui educada a la antigua y la verdad me gusta.  

viernes, 17 de febrero de 2017

Rescatando perrito

En diciembre y enero, vi varias veces vagando en la cuadra un perrito blanco, todo peludito, que me recordaba a mi pequeña. Un día me cansé de verlo mendigando y lo llevé a la veterinaria a que le dieran un buen baño. En mi casa le acondicioné un espacio y le puse un suéter que fue de Coffee. Pero cuando sus dueños pasaron gritando su nombre, escapó de mi casa para irse con ellos.

Casi un mes después de esto, un fin de semana completo, el perrito anduvo suelto de nuevo. Se metió a mi casa dos veces buscando comida y queriendo jugar. Fui a casa de mis vecinos 2 veces sin lograr que alguien me abriera. Luego de 3 días viéndolo suelto, no pensé y me dejé llevar, lo subí a mi coche y se lo entregué a una persona que se dedica a rescatar perritos.
Lucas con el suéter de Coffee
Horas después mi conciencia se hizo presente y ahora me sentía muy mal por haber tomado algo sin permiso. Aunque se que él perrito necesitaba atención. No era un perro callejero, tenía hogar. Aunque sus dueños fueran descuidados.
Dos horas después de lo que hice, escuché a sus dueños gritando su nombre. Me armé de valor y les dije lo que había hecho. Yo esperaba que me insultaran y me dijeran de cosas, pero vaya sorpresa cuando me dijeron: Si quieres quedártelo, adelante, desde la otra vez te íbamos a decir que sí lo querías...
No podía creerlo.
Yo me habría quedado con él. Pero viven cerca de mi casa y se hubiera escapado, ya que se acostumbró a vagar. Afortunadamente, dos horas después de que lo entregué, le encontraron hogar. Hoy se llama Lucas y vive en una casa donde no duerme en el patio. La historia tuvo un final feliz. Y yo prometo no volver a recoger un perro que sí tiene dueño, por más que el corazón se me apachurre por verlo descuidado.
Lucas con su nueva familia

martes, 14 de febrero de 2017

40s no son los nuevos 30s




Estoy en mi tercer década de vida... Ya casi termina y comenzaré la cuarta si dios quiere en unos años más. Para eso todavía me faltan 3 años y 3 meses para subir al 4° escalón. No tengo prisa por llegar a 40. Dejaré que el tiempo vaya pasando como hasta ahora, cumpliendo cada año como es costumbre. Es un poco atemorizante llegar a 40. Es una edad que suena fuerte, que para mi ya refleja vejez. 


Hasta hace unos años nunca me había dado pena decir mi edad. Pero conforme han ido pasando lo años, en especial los últimos 5, como que si me pesa ir diciendo la edad que tengo. Pero las canas y las arrugas comienzan a asomarse y el paso del tiempo es inevitable. 

Cuando alguien intenta calcular mi edad, normalmente me restan años y eso es halagador, pero cuando te suman no lo es. Duele cuando te calculan de más y ¿qué haces? Nada, bueno depende quien sea. Por ejemplo mi vecina, a la cual a penas estoy conociendo. Hace unas semanas me pidió ayuda para organizar su fiesta de cumpleaños, quería celebrar a lo grande que llegaba a los 40s. 

Entre la plática me dijo: pues ya ves que somos de la edad... Yo me quede seria y con ojos de plato, mientras en mi cabeza gritaba: queeeeeeeé te pasa, a mi aún me faltan 3 años para llegar a esto. Ahí quedo eso. Pero resulta que hace unos días le dijo la misma frase a mi mejor amiga que vino a visitarme. Yo no lo escuché, hasta que mi amiga me lo contó y me dio mucha gracia, porque ella es más chica que yo, a penas tiene 33. O sea que le pasa a mi vecina, ahora todos somos de 40 años? Todas las de treinta y tantos ya automáticamente debemos decir: 40 años? No. Qué nos dejen vivir cada año como lo que es, los 30, 31, 32, etc, sin decir, ya estás vieja, ya practicamente tienes 40. 

A ella le gustaría que yo le dijera, ya casi tienes 50s. No verdad? Jajajaja creo que esto si me dolió. Pero 3 años de diferencia tal vez con el pasar del tiempo no se vean como muchos, pero cuando ella tenía 3 años de edad, ella ya caminaba, comía sola y hablaba y yo era una bebé recién nacida. Creo que si hay diferencia, no? La edad es un tema un poco complicado de tratar. Como lo es el peso. Son temas que a toda mujer nos son difíciles de llevar. 

De toda la gente que conozco es la única que me ha sumado años. Los demás me quitan y no creen que tenga 36, aunque yo siento que cada día me veo más vieja, más arrugada y maltratada. Pero para nada me siento de 40 y aún me faltan 3 años 3 meses y que me dejen disfrutar mis últimos treinta y tantos. Ya después la alcanzaré, bueno en verdad no, porque ella siempre me llevará 3 años y 3 meses de ventaja. 

domingo, 12 de febrero de 2017

Amistad

  1. "Relación de afecto, simpatía y confianza que se establece entre personas que no son familia".


Es necesario que las personas socialicemos y conozcamos gente para tener una estabilidad emocional. Gente con la que sentimos afinidad y poco a poco, con la convivencia se vaya estableciendo confianza. Hay una frase que dice que los amigos son la familia que uno escoge. Porque muchas veces esos amigos pasan a ser como hermanos. 

La vida te va mostrando quienes son amigos solo de ocasión y quienes estarán ahí para ayudarte a levantarte cuando haz caído. Para conocer a los verdaderos, nos llevaremos tal vez una que otra decepción. Pero estás pasan cuando nos creamos expectativas y no son cumplidas. Creo que nunca debemos esperar que las personas den todo por nosotros. Como comentaba en una entrada anterior: No esperes nada y serás feliz. Porque cuando deseamos una respuesta igual a o que nosotros haríamos por los demás, empiezan las decepciones. 

Yo no tengo muchos amigos, no he sido muy sociable. Pero los pocos amigos que tengo son muy especiales  y en los que confío plenamente. Bien dice el dicho: Los amigos los cuento con los dedos de una mano y me sobran dedos...

Tal vez con el tiempo hasta me sobren mis 10 dedos para contar a mis amigos. Espero no suceda, pero la vida da tantas vueltas que uno nunca sabe. He tenido amigos que han entrado, salido y regresado a mi vida. Así que solo seguiré siendo la misma de hasta ahora, estando ahí en las buenas y malas para ellos. Escuchando y ayudando en lo que yo pueda. Continuando con mis cursilerías, a pesar de ya no estar en secundaria, soy de las que siguen enviando postales en días especiales y mandando mensajes o correos para demostrarles que los quiero. Porque lo que importa en este mundo es que haya alguien al otro lado al que le interesemos, que se acuerde de nosotros, que nos quiera con todos nuestros defectos y virtudes. Que no nos juzgue, que nos aconseje y con el cual podamos compartir experiencias. 

Pasado mañana se celebra una fecha que se ha vuelto muy comercial, pero de la que debemos rescatar que hay que celebrar, aunque no demos ningún regalo, el que tengamos amigos, esa familia que escogemos para aligerar el camino.