El bullying últimamente es un tema de "moda" pero por qué si este siempre ha existido.
Analicemos primero que es el bullying. Es el acoso escolar (aunque puede darse en otras áreas, como la laboral o hasta familiar), que podemos también definir como hostigamiento. Consiste en cualquier tipo de maltrato psicológico, verbal o físico de un individuo a otro en varias ocasiones.
Analicemos primero que es el bullying. Es el acoso escolar (aunque puede darse en otras áreas, como la laboral o hasta familiar), que podemos también definir como hostigamiento. Consiste en cualquier tipo de maltrato psicológico, verbal o físico de un individuo a otro en varias ocasiones.
En
últimas fechas se ha puesto de moda y yo opino que es por las redes sociales.
Antes el acoso se quedaba en la escuela y ya. Pero ahora, si alguien desea
burlarse de una persona o situación es fácil subir una foto o un video y
compartirlo en las redes y hacer que el "chistecito" se haga masivo.
Muchas veces no somos conscientes de lo global que es el internet y de que una
pequeña broma puede desencadenar algo más grave. Hemos
escuchado o leído noticias de que jóvenes han llegado a suicidarse porque
sufrieron de burlas por algún video de ellos subidos a la red.
Ahora
porque siempre hay un acosador y una víctima? Qué es lo que desencadena
esto?
Siempre
hay niños que quieren ser lo líderes, los que dominen y toman a sus víctimas,
siempre aquellos niños callados y retraídos, A los cuales molestan y acosan con
cualquier tontería. La víctima por su forma de ser, que normalmente tiende a
ser sumisa, guarda en silencio el hostigamiento. Es por eso que muchas veces
los padres y profesores están ajenos a la circunstancia.
Pero
por qué el hostigado guarda silencio? Tal vez por miedo o porque crea que nadie
podrá ayudarlo. El problema es que escondiendo esto a la larga termina en
problemas emocionales y complejos que son difíciles de quitar.
Actualmente
yo soy una persona que no se deja de nadie, que protesto inmediatamente cuando
algo o alguien me molestan, pero no siempre fue así.
Yo
fui víctima de bullying en diferentes etapas de mi vida. Desde el kínder cuando
un compañero me jalaba el pelo y me hacía llorar. Nunca me queje porque le
tenía miedo a ese niño. Luego en 6to año de primaria, sufrí porque un grupo de
5 niños se la pasaban fastidiándome por la forma de mi nariz. La cual no tiene
nada de extraña pero para ellos en aquel entonces les parecía muy respingada
(con los años creo que ya se cayó porque ya no la tengo así). Me decían nariz
de pepe pepe (un payaso mexicano que tenía una nariz larga y solo la punta
respingada) y hasta canción me compusieron, jajajajaja. Si hoy me rio pero en
esa época, a mis escasos 11 años, yo odiaba pasar junto a ellos y escucharlos reírse,
odiaba mi nariz deseaba operármela. Con el paso del tiempo ese complejo
desapareció. Mi nariz no es perfecta pero ya no me desagrada.
Pero
mi historia de bullying no acaba ahí. La peor fue en la secundaria. Yo acababa
de mudarme del D.F. al norte del país. Vivía con mis abuelos paternos. Todo un
gran cambio para mí y luego en una edad tan complicada como la adolescencia.
Sí estos cambios no eran suficientes, todavía tenía que acostumbrarme a una escuela de paga (y es que vaya que fue un cambio muy grande para mí). Yo estaba muy vulnerable, extrañaba mucho a mis papás (mi papá estaba esperando el cambio en el trabajo, el cual se tardó 6 años, pero esa es otra historia que luego contaré). El vivir con mi bisabuela, una ancianita ya con demencia senil y que estaba muy amargada (su pasado amoroso no fue muy bonito). El único que estaba al pendiente mío era mi abuelito, pero con su carácter tan débil hacía lo que otros le pedían. A parte de esto, el cambiar de una ciudad tan grande y movida como el D.F. a una pequeña ciudad que en aquel año era tan tranquila y aburrida fue algo difícil.
Yo me sentía mal, estaba triste la mayor parte del tiempo y no quería comer, según yo porque la comida no sabía bien. Con este panorama me tocó la mala fortuna que había en mi grupo una niña que me agarró de su puerquito. Era mucho más alta que yo. De carácter fuerte, le gustaba llamar la atención. Era ruda y más conmigo. Yo no le hablaba, es más, la ignoraba y creo eso era lo que provocaba su enojo y por eso me molestaba, más bien me insultaba.
Como nos sentaban por apellidos, nos tocaba estar cerca, ya sea que la sentaran a un lado, detrás mío o peor aún, juntas en la clase de mecanografía. Cuando me hablaba, no lo hacía por mi nombre, solo me decía: ey tú, desperdicio, basura, insecto, etc.
Yo no contestaba, la ignoraba y eso la hacía enojarse más. Cuando me paraba de mi asiento por alguna razón y quería volverme a sentar, no me dejaba, porque empezaba a mover mi pupitre. A mis pocas amigas les decía que no me hablaran, claro ninguna le hizo caso. Sé que no fueron cosas graves las que me hizo, pero tenerla así a diario y por un año, fue insoportable. Yo no decía nada en casa, mis papás estaban muy lejos para ayudarme y mi abuelito con muchos problemas.
Pero un día me cansó. No sé ni porque, pero me fui directo a acusarla con la profesora de orientación vocacional. Vagamente recuerdo que la mandaron llamar y no sé qué le habrán dicho que nunca más me volvió a molestar. Afortunadamente los 2 siguientes años no estuvimos juntas, creo esa fue la única solución que el colegio encontró para esto.
Sí estos cambios no eran suficientes, todavía tenía que acostumbrarme a una escuela de paga (y es que vaya que fue un cambio muy grande para mí). Yo estaba muy vulnerable, extrañaba mucho a mis papás (mi papá estaba esperando el cambio en el trabajo, el cual se tardó 6 años, pero esa es otra historia que luego contaré). El vivir con mi bisabuela, una ancianita ya con demencia senil y que estaba muy amargada (su pasado amoroso no fue muy bonito). El único que estaba al pendiente mío era mi abuelito, pero con su carácter tan débil hacía lo que otros le pedían. A parte de esto, el cambiar de una ciudad tan grande y movida como el D.F. a una pequeña ciudad que en aquel año era tan tranquila y aburrida fue algo difícil.
Yo me sentía mal, estaba triste la mayor parte del tiempo y no quería comer, según yo porque la comida no sabía bien. Con este panorama me tocó la mala fortuna que había en mi grupo una niña que me agarró de su puerquito. Era mucho más alta que yo. De carácter fuerte, le gustaba llamar la atención. Era ruda y más conmigo. Yo no le hablaba, es más, la ignoraba y creo eso era lo que provocaba su enojo y por eso me molestaba, más bien me insultaba.
Como nos sentaban por apellidos, nos tocaba estar cerca, ya sea que la sentaran a un lado, detrás mío o peor aún, juntas en la clase de mecanografía. Cuando me hablaba, no lo hacía por mi nombre, solo me decía: ey tú, desperdicio, basura, insecto, etc.
Yo no contestaba, la ignoraba y eso la hacía enojarse más. Cuando me paraba de mi asiento por alguna razón y quería volverme a sentar, no me dejaba, porque empezaba a mover mi pupitre. A mis pocas amigas les decía que no me hablaran, claro ninguna le hizo caso. Sé que no fueron cosas graves las que me hizo, pero tenerla así a diario y por un año, fue insoportable. Yo no decía nada en casa, mis papás estaban muy lejos para ayudarme y mi abuelito con muchos problemas.
Pero un día me cansó. No sé ni porque, pero me fui directo a acusarla con la profesora de orientación vocacional. Vagamente recuerdo que la mandaron llamar y no sé qué le habrán dicho que nunca más me volvió a molestar. Afortunadamente los 2 siguientes años no estuvimos juntas, creo esa fue la única solución que el colegio encontró para esto.
Lo
más raro de todo fue que el último año de secundaria, en los xv años de una
amiga, esa niña que me hizo bullying se sentó en la misma mesa que mi mamá y yo
(cabe aclarar que nosotras llegamos primero) y casi toda la noche se la pasó
platicando con mi mamá. Al terminar la fiesta le conté todo lo que esa niña me
hizo. Mi mamá solo dijo: me cayó bien. Jajajajajajajaja. En fin, quería
compartir esto. Si tengo varios complejos como la mayoría de la gente, pero
siento o creo yo que esos acosos y hostigamientos que sufrí de niña han quedado
en mi memoria como recuerdos, pero que no me duelen o que no me lastimaron más.
Nunca me hice daño o pensé en hacerlo por el hecho de sufrir de acoso escolar.
Sé que va a sonar tonto, pero en esa época de secundaria, en la cual me sentía
tan sola y mal me refugié en la música, sobre todo de Menudo, jajaja siiiiii
soy fan de ellos y no me da pena admitirlo. Creo que el escucharlos y pensar
que nuevas canciones cantarían o que integrante saldría y quien lo sustituiría me hacía seguir hacia adelante.
Es
por ello que a todo aquel que sea padre de familia le aconsejo que trate de
pasar mucho tiempo con sus hijos para que estos se sientan queridos y
aceptados. Para todo aquel joven que sufre de acoso, le digo, tranquilos sé que
no es fácil, que da coraje, que algunas palabras hieren, pero que quien nos las
dice es alguien carente de afecto, que necesita atención y que tal vez quiera
ser nuestro amigo y no se atreve a pedírnoslo. O tal vez sea alguien que nos
tenga envidia por algo. Así que traten de ignorar, si el acoso es a golpes,
traten de buscar ayuda con sus padres y profesores, en verdad es importante
hablar y comentar, no guarden silencio, no deja nada bueno.
Recordé todo esto que me sucedió cuando era adolescente, porque hace unos días que vi a mis amigas de secundaria, una de ellas sacó una foto donde aparecemos y oh sorpresa, a mi lado está mi acosadora. ¿Qué hace junto a mi? hoy 20 años después
creo que esta chica solo quería ser mi amiga pero le daba pena.
Sufrí de hostigamiento y aquí sigo.
Sufrí de hostigamiento y aquí sigo.
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